Todo proceso de descubrir nuestra propia vulnerabilidad a través de sentimientos de ansiedad,miedo, estres e incomodidad –con los que no nos sentimos identificados– nos hace dudar de nosotros mismos y revuelve todas las ideas que tenemos en la cabeza. De repente lo más estable que tenemos en nuestra vida, se tambalea de una manera irreconocible. Esta duda interna hace que nuestras ansiedades iniciales se vayan extendiendo hasta alcanzar un impacto negativo muy importante en nuestras vidas.

Se convierte en esencial tener a nuestro alcance las herramientas necesarias para poder hacerla frente, a saber: relativizar su gravedad, aceptar el reto de superarla, buscar una guía y exponerse a nuestros miedos.

La ansiedad llena nuestra mundo interior de pensamientos negativos, el humor es su kriptonita.